Aun recuerdo cuando conocí el Skype, fue alrededor del 2008. Skype salió a la luz en el 2003, pero aún luego de 5 años no era tan conocida pues tenía por delante a la aplicación más usada para comunicaciones por texto, voz y video: el MSN de Microsoft, que utilizaba las cuentas de correo de Hotmail como acceso, y en ese entonces quién no tenía una cuenta de Hotmail.

Cuando comencé a utilizar el Skype, era realmente increíble la calidad de la comunicación de voz. Pero más allá de eso, lo que me sorprendió fue la cantidad de aplicaciones que tenía. Ahora descargamos aplicaciones para nuestros celulares desde Play Store o iTunes, pero este concepto ya lo empleaba Skype en sus inicios. Entre ellas, existía una excelente para los negocios, permitía lo que ahora es muy comentado: las videoconferencias. Podías conectarte con otras 8 personas y compartir tu pantalla. En ese entonces era algo pionero.

No comprendía porque las personas me seguían pidiendo mi cuenta de Messenger, les rogaba que sacaran una de Skype. Y entonces llegó la mala noticia. Una vez más, Microsoft con su política de “no mejores...solo compralo”, adquirió a Skype. Comprendió que Skype era muy superior a su MSN, y que sería cuestión de tiempo para que las personas comenzarán a migrar en masa. Lo malo no es que lo comprara, lo malo es que ya sabemos lo que hace MS cuando compra algo...absolutamente nada.

Poco tiempo después comenzó la desilución. Para aquellos que sacaron su cuenta de Skype después de la compra por MS les habrá parecido que solo se trataba de una nueva imagen de pantalla, cambio de logo, y unos sonidos más llamativos. Nunca se enteraron de las aplicaciones, porque simplemente desaparecieron. Y yo por mi parte tuve que regresar a las reuniones presenciales, llevando una libreta de apuntes o cargando con una laptop.

Gracias a Dios, en el mundo de la tecnología siempre habrá alguien dispuesto a dar un avance; y así, Google una vez más se aprovechó de la lentitud de su competencia y sacó el Hangout.  Inicio a promocionarlo como la oportunidad para realizar videoconferencia con varios participantes.  No eran los pioneros, pero como Skype había perdido esta y más funcionalidades, eran los únicos.

El Skype no ha cambiado casi nada desde su compra por MS, pero como es de esperar por Google, cada vez que tiene un buen producto continua mejorándolo y buscando nuevas formas de aplicación.

No se cuanto más aguante el Skype, porque continúa relacionado a las cuentas de Hotmail y MSN, por lo que aún tiene muchos usuarios; pero, si eres empresario, o tienes una pequeña o mediana empresa, te recomiendo que le des un vistazo al Hangout; puede que las videoconferencias no sean lo tuyo, pero las funciones que tiene hoy son muy poderosas para hacer más eficiente las operaciones de tu negocio.

Por dar solo un ejemplo: con el Hangout puedes grabar una formación que automáticamente es subida a tu canal de Youtube, y si cuentas con el Google Apps for Business, puedes darle tu imagen corporativa. Imagina el tiempo que cuesta formar a un empleado nuevo, al contar con una plataforma de formación se reduce en gran medida; o videos tutoriales para el autoservicio de clientes.

Si quieres saber más sobre el Hangout o el Google Apps for Business no dudes en contactarnos, te brindaremos toda nuestra asesoría: info@websesor.com